Hace poco más de una semana se heló una gran parte de las superficies de maíz, frijol, hortalizas, y otros cultivos sembrados en los estados del norte del país, incluyendo Sinaloa, Sonora, Tamaulipas, etc. Las heladas fueron las más severas en más de medio siglo. Muchos de los productores afectados actualmente están resembrando maíz o sorgo y necesitan semilla para hacerlo. Los proveedores de semilla no estaban preparadas para esta eventualidad. Sin embargo, hacen todo lo que está a su alcance para enviar semilla a las zonas de desastre. Las noticias de estos acontecimientos ya recorrieron el país y el mundo.
He estado recibiendo llamadas y correos electrónicos de productores y distribuidores preocupados por toda la semilla que se está enviando al norte, preguntando si Unisem va a tener semilla suficiente para cubrir la demanda en primavera-verano en el centro y sur del país.
La respuesta corta es sí.
Nuestras ventas en Sinaloa y Sonora representan menos de una cuarta parte de nuestras ventas totales. (No estamos comercializando en Tamaulipas.) Si este año mandamos un poco más de semilla al noroeste, esto no afecta significativamente la disponibilidad de semilla para el resto del país.
En Unisem, como probablemente en la mayoría de las casas semilleras, tratamos de producir siempre un poco más de semilla de la que estimamos vender, tanto para amortiguar las fluctuaciones inevitables en la demanda y las imprecisiones de los presupuestos, como también para asegurarnos contra posibles bajas en los rendimientos en la reproducción de la semilla. En un año normal resultan excedentes que se guardan para la siguiente temporada. La semilla de maíz y sorgo bien almacenada conserva su germinación y vigor.
Por todo lo anterior contamos con los inventarios necesarios para cubrir la demanda que habíamos estimado originalmente, incluso si vendemos en Sinaloa más de lo que teníamos contemplado. Si todas las semilleras trabajaran de manera similar como Unisem, no debería haber problema.
La respuesta larga es un poco más complicada.
Algunas de las empresas semilleras más grandes tratan de producir la semilla siempre en el último momento antes de necesitarla. Buscan aplicar el concepto de “just-in-time” a la semilla. Esto significa, por un lado, que trabajan con menos inventarios (en proporción a sus ventas) que semilleras pequeñas. Por otro lado, significa también que producen una parte de la semilla en Sinaloa, a veces también en Sonora, estados cuyas temporadas de siembra son contra-cíclicas con las de temporal. Los campos de reproducción fueron afectados por las heladas en la misma medida como los campos de producción de grano. No tengo un dato de cuánta superficie de reproducción se puede haber helado, pero es obvio que sí hubo tales pérdidas y que esto puede repercutir en el mercado. Recuerdo que hace unos 8 años, una helada en Sonora afectó la disponibilidad de un híbrido en particular de otra marca.
Además, la temporada de primavera-verano pasada en el Bajío, donde se produce una gran parte de la semilla híbrida de maíz para México, sufrió una mala distribución de las lluvias. Inició con mucha agua y terminó con sequía. Por lo tanto, es posible que las empresas semilleras en general hayan sufrido rendimientos más bajos de los normales y empezado el año con inventarios relativamente bajos.
Debido a estos hechos y suposiciones, considero que es posible que algunas de las empresas más grandes vayan a tener problemas de abastecimiento. En el mejor de los casos simplemente faltarán ciertas variedades, orillando a los productores a sembrar una variedad diferente, pero buena, de la misma marca. En el peor de los casos, no habrá suficiente semilla híbrida de calidad. Tal desabasto desde luego se contagiaría a otras empresas, puesto que los productores que no encuentran la semilla con su proveedor acostumbrado, buscarán en otras partes. Los productores deberán tener especial cuidado en la selección de la semilla, ya que, si una cosa es segura, es que no faltarán los «vivos» que importarán semillas de variedades que no han sido probadas debidamente en México, o que venderán semilla pirata.
A los productores les recomiendo procurar su semilla con tiempo, para obtener una variedad que ya conocen y probaron, de un proveedor responsable. Si dentro de sus planes de siembra está Unisem, los invitamos a participar en nuestra preventa.