La agricultura no es un negocio fácil. Todos los ciclos empezamos de nuevo y nos exponemos a los vaivenes del clima, de las plagas y de los precios. Para lograr el sustento, ya no es suficiente estar muy bien al pendiente del cultivo. Tenemos que planificar, contratar, cuidar la rentabilidad y minimizar los riesgos.
Una de las posibilidades que tenemos para reducir riesgos es sembrar híbridos con un desempeño comprobado, es decir híbridos que se han evaluado durante varios ciclos y que año tras año han dado buenos resultados. La estabilidad es precisamente uno de los principales beneficios de los híbridos «todo terreno» de Unisem. Así lo demuestra una multitud de resultados de ensayos internos y externos, entre ellos los del Valle del Yaqui, Sonora, que tenemos el gusto de poder presentar aquí.
Mientras que otras compañías incluyen cada año otro sorgo, ocasionalmente con buenos resultados, otras veces no tanto, los sorgos de Unisem, específicamente Argos y Nyx han quedado entre los primeros lugares todos estos años, demostrando su superior adaptabilidad, seguridad y rentabilidad.