¿Cómo influye el cambio climático en el rendimiento y precio del maíz?

El maíz es el cultivo más extendido en el mundo. Su uso va desde la alimentación como aceite de cocina, alimentos industrializados, alimento para ganado y hasta la producción de combustible para automóviles. De ahí su importancia para la economía mundial.

Uno de los principales problemas globales es el cambio climático, que se define como la “Variación del clima por periodos largos, ya sea por condiciones naturales o como resultado de actividades humanas” según la SEMARNAT.

¿Cómo se relacionan estos dos temas?

En una investigación reciente realizada en la Universidad de Washington, se analiza el efecto que el cambio climático puede tener sobre los rendimientos del cultivo y su precio. El estudio utilizó proyecciones climáticas globales con modelos de crecimiento de maíz.

Los resultados muestran que con el aumento de la temperatura es más probable que diferentes países experimenten al mismo tiempo grandes pérdidas de cultivos, lo que tiene grandes implicaciones sobre los precios y la seguridad alimentaria.

Haciendo una proyección, con un incremento de 2 ℃ en la temperatura promedio global, que se proyecta alcanzar si no se logran disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero, el riesgo de que las zonas productoras de maíz experimenten bajos rendimientos es de 7 %. En una proyección más alarmante, con un incremento de 4 ℃, que es el tanto en el que se ha incrementado la temperatura promedio en México, hay un 86 % de probabilidad de que los principales exportadores de maíz sufran simultáneamente una disminución en sus rendimientos.

En este escenario, las causas de la disminución en rendimientos pueden adjudicarse a:

  • Mayor demanda de agua por las plantas cultivadas a mayor temperatura.
  • El calor extremo afecta negativamente en etapas cruciales del desarrollo de la planta como floración y llenado del grano.
  • Disminución de tierras cultivables por desertificación.
  • Cambios en las estaciones del año, temporadas de calor prolongadas, lluvias escasas o intensas.
  • Proliferación de enfermedades y plagas.

A consecuencia de lo anterior, se espera que el cambio climático provoque una volatilidad sin precedentes en el precio del maíz, su disponibilidad y la capacidad del consumidor para adquirirlo, tanto en los mercados locales como a nivel internacional.

El panorama ideal sería que a través de esfuerzos globales se lograra detener el avance del cambio climático, y así poder evitar los efectos adversos que este conlleva en todos los aspectos. Sin embargo, ante la tendencia en aumento de la emisión de gases de efecto invernadero, se destaca la importancia de la inversión en investigación y desarrollo de nuevas tecnologías agrícolas, como pueden ser cultivos con mayor rendimiento y tolerancia al calor, para garantizar la seguridad alimentaria en el futuro.

Fuentes

Tigchelaar M., Battisti D. S., Naylor R. L., y Ray D. K. 2018. Future warming increases probability of globally synchronized maize production shocks. National Academy of Sciences.

Warmer climate will dramatically increase the volatility of global corn crops

¿Cómo afecta el cambio climático a México?

Rotación de cultivos: Beneficios de la rotación del cultivo de maíz

Rotación de cultivos.

Los rendimientos de los cultivos han manifestado incrementos considerables, con índices de extracción de nutrientes también crecientes, creándose una mayor dependencia de los fertilizantes. Es necesario encontrar una manera sustentable de resolver esta problemática.

Cuando hablamos de sustentabilidad hacemos referencia a una acción que permita obtener producciones rentables sin comprometer la capacidad de producción del recurso involucrado, en este caso el suelo, y sin generar efectos negativos en otros componentes del ambiente. En este sentido la rotación de cultivos es una clave para mejorar la sustentabilidad y rentabilidad de un cultivo.

La rotación de cultivos consiste en alternar plantas de diferentes familias y con necesidades nutritivas distintas en un mismo campo en otros ciclos. En contraste, el monocultivo es la siembra repetida de una misma especie en el mismo campo, año tras año.

Una forma de conseguir un sistema de producción sostenible es considerar los sistemas naturales como un modelo a imitar. Los sistemas naturales tienden a maximizar la captura de recursos y la producción de biomasa a la vez que minimizan la pérdida de nutrientes. Los sistemas naturales mantienen el suelo cubierto y protegen el suelo de la erosión. A medida que se desarrollan los sistemas naturales, siguen un proceso de «sucesión» en el que un conjunto de especies modifica el medio ambiente en beneficio del siguiente conjunto de especies. De manera similar, un buen programa de rotación debe ser productivo, minimizar la pérdida de nutrientes, prevenir la erosión del suelo, favorecer la resistencia contra las plagas y enfermedades y asegurar que cada cultivo beneficie al siguiente.

La rotación del cultivo de maíz con leguminosas es la más aplicada, con la inclusión de algunos cultivos de invierno como en algunas zonas. La relación se establece al conocer sus demandas nutricionales. El maíz tiene un requerimiento alto de nitrógeno y fósforo, por consiguiente, si se cultiva maíz año con año, cada vez será necesario suministrar más de estos estos nutrientes en fertilización. En cambio, rotar con alguna leguminosa, el frijol por ejemplo,  que es una especie fijadora de nitrógeno, mejora la fertilidad de los suelos al aumentar el contenido y disponibilidad de este macronutriente, el cual puede ser aprovechado por el maíz.

¿Cuáles son las ventajas de la rotación de cultivos? 

  • Se reduce la incidencia de plagas y enfermedades, al interrumpir sus ciclos de vida.
  • Se puede mantener un control de malezas, mediante el uso de especies de cultivo asfixiantes, cultivos de cobertura, que se utilizan como abono verde o cultivos de invierno cuando las condiciones de temperatura, humedad de suelo o riego lo permiten.
  • Proporciona una distribución más adecuada de nutrientes en el perfil del suelo (los cultivos de raíces más profundas extraen nutrientes a mayor profundidad).
  • Ayuda a disminuir los riesgos económicos, en caso de que llegue a presentarse alguna eventualidad que afecte alguno de los cultivos.
  • Permite balancear la producción de residuos: se pueden alternar cultivos que producen escasos residuos con otros que generan gran cantidad de ellos.
  • Mejora la rentabilidad del cultivo al mejorar los rendimientos y reducir los costos relacionados a la fertilización, control de malezas, plagas y enfermedades.
  • Reduce las necesidades de labranza, el uso de maquinaria y evita problemas de compactación del suelo.

Fuentes:

Alfonso C., Riverol M., Porras P., Cabrera E., Llanes J., Hernández J. y Somoza V. 1997. Las asociaciones maíz-leguminosas: Su efecto en la conservación de la fertilidad de los suelos. Agronomía Mesoamericana. 8 Pp. 65-73.

Álvarez, M. y García, M. 2000. Los abonos verdes: una alternativa para la producción sostenible de maíz en las condiciones de los suelos Ferralíticos Rojos de la Habana. Tesis. Instituto Nacional de Ciencias Agrícolas.  

CIMMYT. La importancia de la rotación de cultivo [Folleto]. (n.d.). México.

Pedrol H., Castellarín J. y Salvagiotti F. Sin Año. Importancia del maíz en la rotación de los cultivos: Sustentabilidad y diversificación de riesgos productivos. IdiaXXI. Pp. 141-146.

El Complejo del Achaparramiento de Maíz

Clorosis en hojas de maíz por el virus del rayado

En recorrido por el estado de Puebla entre los municipios de Atlixco e Izúcar de Matamoros, un cliente nos alertó sobre un problema fitosanitario de maíz prevalente en la zona.

Nos mostró dos campos y los síntomas que presenta el cultivo, observamos plantas enanas y raquíticas, hojas rayadas como si se tratara de una deficiencia de nutrición, elotes que casi no tenían grano. En las plantas más grandes observamos una coloración púrpura en los bordes de las hojas.

Revisando la literatura y hablando con un especialista del INIFAP, concluimos que muy probablemente se trata del Complejo del Achaparramiento de Maíz. Esta enfermedad puede ser causada por diversos virus u organismos parásitos, entre ellos el virus del rayado fino del maíz, un espiroplasma, un fitoplasma y un micoplasma.

Deficiencia en el desarrollo de la mazorca

Afortunadamente no es necesario distinguirlos ya que todos tienen en común que son transmitidos por varios insectos como la chicharrita. Estos insectos ingieren los organismos causantes cuando se alimenta de una planta enferma y luego los transmiten a otras plantas al alimentarse de ellas.

Por la forma de transmisión, la enfermedad es más común en zonas donde se cultiva maíz todo el año, como es el caso de esta región entre Puebla y Morelos, donde el cultivo de maíz para elote es común en invierno.

Para combatir esta enfermedad se recomienda utilizar semilla tratada con insecticidas como por ejemplo Cruiser y aplicar insecticidas para evitar la propagación de la chicharrita.

Fuentes:

Daños al cultivo de maíz por exceso o falta de agua

Los daños relacionados con el agua son de los principales problemas a los que se enfrentan los agricultores. Muchos de los problemas que se mencionan a continuación no pueden evitarse del todo, ya que dependen del temporal de lluvias, pero sí se puede trabajar en la prevención de algunos de ellos. Por ejemplo mediante el trabajo en un buen drenaje del terreno para evitar inundaciones.

Inundación o saturación de suelos

Etapas fenológicas del cultivo de maíz.

 

Los problemas comienzan desde la siembra, un exceso de humedad combinado con el efecto de temperaturas altas pueden producir cocimiento o apozolamiento de la semilla sembrada. Después de la nacencia, las plantas que crecen en suelos inundados pueden volverse amarillas, marchitarse y eventualmente morir.

Aspectos a considerar al evaluar los riesgos de daño por inundación:

  • Las inundaciones antes de la etapa V6 son más dañinas que las que ocurren más tarde.
  • Las plantas que quedan completamente sumergidas corren un mayor riesgo de daño que aquellas parcialmente sumergidas.
  • Mientras más tiempo persista la inundación, el daño a la planta aumenta.
  • La temperatura del suelo afecta la rapidez con que las inundaciones pueden dañar las plantas. Las plántulas pueden sobrevivir hasta cuatro días de inundación cuando las temperaturas son relativamente frías (alrededor de 15 ℃) pero sobrevivirán menos días si las temperaturas son más cálidas (22 ℃ o más).
  • Las inundaciones dañan las raíces, haciendo que las plantas sean más susceptibles a daños posteriores.
  • Cantidades sustanciales de nitrógeno pueden perderse de suelos inundados por lixiviación.
  • Las inundaciones o los suelos húmedos favorecen la pudrición de semilla y la proliferación de plagas.
  • A medida que disminuye el nivel del agua en una inundación, la deposición de lodo en las hojas puede reducir la capacidad de la planta para realizar la fotosíntesis.
  • A medida que el suelo se seca, se puede formar una costra y causar problemas de emergencia para cultivos replantados.

Parcela inundada

Daños por sequía

El maíz requiere aproximadamente de 8.5 mm de agua por día en la etapa R1, que es la demanda de agua más alta de su ciclo. Cuando las plantas se ven afectadas por estrés hídrico, la aparición de estigmas puede retrasarse. Como consecuencia se genera una falta de sincronización entre la liberación del polen y la aparición de estigmas, resultando en una mala polinización, lo que reduce el potencial de rendimiento.

Las hojas de la planta se enrollan sobre sí mismas durante un estrés hídrico para reducir la pérdida de agua. Este enrollamiento reduce la capacidad fotosintética y síntesis de carbohidratos, lo que puede resultar también en una reducción de rendimiento.

Hoja de maíz enrollada por estrés hídrico.

 

Para casos de enconstramiento o taponamiento de la semilla de maíz, plagas de la raíz, exceso o falta de agua, heladas, etc. ofrecemos el Seguro de Resiembra Unisem, que es aplicable hasta los 22 días de sembrado o fecha lluvia o riego en caso de siembras en seco. ¡Queremos que todos lo cultivos se logren!

Fuente

Mueller D. & Pope R. 2009. Corn field guide: A reference for identifying diseases, insect pests, and disorders of corn. Iowa State university of Science and Technology.