Agradecemos a todos los participantes de la convocatoria Escribe “al Grano” con Unisem y muchas felicidades a los ganadores. Con gusto presentamos el aporte del Ing. Mario Rocha Ramírez, de Cd. Río Bravo, Tamaulipas.
Drenes Parcelarios
Desde tiempos remotos el hombre aprendió a construir canales, zanjas, desagües, diques y otras obras para preservar sus suelos agrícolas o para recuperarlos. Estas obras eran similares para los fines de riego como para el drenaje, y pueden ser superficiales o subterráneas, abiertas o cerradas.
Las estadísticas indican que en el año 2000 había aproximadamente 381,590 hectáreas que tenían problemas de sales, y/o mantos freáticos superficiales en México, lo que limita la productividad de los cultivos. Y para el 2016, la superficie ya llegaba a 550,000 hectáreas, por lo que para solucionar este problema, en los últimos 20 años se han instalado drenes parcelarios usando tubos perforados, en más de las cien mil hectáreas.
En la zona Norte de Tamaulipas, los principales cultivos son el maíz y el sorgo, por lo que la superficie de siembra con problemas de sales o mantos freáticos superficiales, también se ha estado incrementando año con año, esto a resultados de análisis de suelos que se han hecho por más de 5 años consecutivos, tanto en el área de riego, como la de temporal. En esta zona existen suelos, con niveles bajos de materia orgánica, PH alto, drenaje natural deficiente, suelos mal nivelados o con pendientes, además de un nivel bajo de fertilidad.
Entre los beneficios de colocar drenes parcelarios en los predios con problemas de sales están; mejorar la aireación de las plantas, permitir un mejor y más profundo desarrollo radicular de las plantas, aumentando la disponibilidad y el aprovechamiento de agua y nutrientes. Lo que las hace más resistentes a la sequía aumentando su rendimiento y mejora la productividad de los suelos. Para la instalación de los drenajes parcelarios; se necesita realizar un estudio o levantamiento topográfico y analizar el suelo que se vaya a tratar. En el predio, se hace el trazo para que una máquina especial coloque a 1.5 metros de profundidad, la tubería perforada de 4 pulgadas por 425 metros de largo, protegida con mallas de 400 a 500 micras para evitar que se tape con el tiempo. Esto se descarga a un tubo colector central de 6 a 8 pulgadas, el que a su vez se descarga a un dren de salinidad dentro del predio. |
La distancia entre tubos ramales es de aproximadamente 25 metros, y con las lluvias, o con el agua de riego, salen las sales, haciendo con esto el suelo más productivo en 2 o 3 años.
Algunas desventajas de los drenajes parcelarios son:
- Los altos costos de inversión, debido a las obras que se realizan, así como el material utilizado
- Los drenes de salinidad o recolectores, ocupan una superficie que podría aprovecharse por los cultivos
- En años secos aumenta el déficit hídrico
Beneficios que se obtienen de los suelos bien drenados:
- Minimizar los efectos negativos en la productividad de las parcelas
- Evitar los impactos ambientales negativos
- Evitar el desarrollo de enfermedades fungosas
- Disminuir las pérdidas de Nitrógeno por el proceso de desnitrificación
- Favorece una mejor estructura del suelo y una mayor actividad biológica
- Permite un mejor y más profundo desarrollo radicular de las plantas
- Incrementa la cantidad de oxígeno, favoreciendo el intercambio gaseoso
- Un mejor y más rápido acceso con la maquinaria a las parcelas, en cuanto a labores de preparación, siembra y cosecha
Autor: Ing. Mario Rocha Ramírez, Cd. Río Bravo, Tamaulipas.
Fuentes:
- FIRA 1985. “Serie de Agricultura, Riego y Drenaje”. Volumen 2, Banco de México. México.
- Rojas Rafael. 1976. Drenaje Superficial de Tierras Agrícolas. Serie Riego y
Drenaje. CIDIAT. Venezuela